Los neumáticos son uno de los elementos más importantes de nuestro vehículo. Verificar que se encuentran en un estado correcto y con una presión adecuada hará que duren más, además de ofrecernos una conducción más segura y un viaje más eficiente y respetuoso con el medio ambiente.

Una presión inadecuada, por debajo de lo establecido por el fabricante, provoca que el vehículo ofrezca una mayor resistencia a la rodadura, esto hace que el motor se vea obligado a proporcionar más potencia para desplazarse. La consecuencia no será otra que un aumento del consumo de combustible, que puede ser de entre un 3 y un 4%, y un mayor desgaste.

Llevar menos presión de la recomendada tiene también efectos negativos en la seguridad, ya que aumenta la pérdida de control sobre el vehículo haciendo que la conducción sea más peligrosa e inestable. Por el contrario, un exceso de presión disminuye la adherencia sobre el asfalto provocando vibraciones y menor confort. Por todo esto, es importante mantener siempre la presión recomendada, revisando los neumáticos al menos una vez al mes y, sobre todo, antes de emprender un viaje largo o transportar cargas pesadas.

En los últimos años, los fabricantes de neumáticos han apostado por compuestos de baja resistencia a la rodadura, contribuyendo así al bajo consumo.

Comprueba periódicamente la presión de tus neumáticos y disfruta del confort del viaje.

Como comprobar la presión de los neumáticos

La presión debe comprobarse con los neumáticos en frío, es decir, sin haber circulado muchos kilómetros antes de medirla, ya que la presión aumenta con el calor y ésta no sería fiable.

Quita el tapón de la rueda, coge la manguera de aire y engánchala. Mira el cuadro de la máquina de aire y compáralo con la tabla de presión establecida por el fabricante de tu vehículo. No olvides revisar periódicamente también la presión de la rueda de recambio.

Comprueba que el dibujo del neumático sea lo suficientemente profundo, mínimo 1,6 mm. La rodadura del neumático debería de ser de 3 mm en los de verano y de 4 mm en los de invierno. Haz la comprobación en dos puntos distintos de cada surco principal de la rueda. Si tienes dudas acude a tu taller de referencia donde te darán el soporte necesario.

Recuerda, como conductores no somos solo responsables de nuestra conducción, sino también del correcto mantenimiento de nuestros vehículos. Los neumáticos son un elemento clave a tener siempre en cuenta.

Fuentes:

Revista Autopistas
RACE
DGT