Vacaciones de verano, fines de semana o puentes, cualquier momento es bueno para coger el coche y desconectar lejos de la ciudad. Un trayecto que para muchos se complica al pensar en cómo afrontar el viaje en coche con niños. Tomárnoslo como algo divertido es la clave, aunque también hay que tener en cuenta algunos de estos consejos para conseguir un viaje cómodo y seguro para toda la familia.

Sistema de retención infantil

La seguridad infantil es un tema prioritario en materia de seguridad vial. Tal y como establece la ley los más pequeños deben viajar siempre con un sistema de retención homologado, adecuado a su estatura y peso, hasta que su altura sea igual o superior a los 135 cm. A pesar de que la norma establece el uso de las sillitas hasta los 135 cm, se recomienda que el uso de estas se extienda hasta los 150 cm de altura. La DGT explica que el uso de los sistemas de retención infantil (SRI) reduce hasta en un 75% las muertes y en un 90% las lesiones en los menores.

Planifica el viaje

Un viaje largo puede ser cansado e incómodo para los más pequeños, planificar el viaje con alguna aplicación móvil como Autopistas en Ruta nos permitirá tener el detalle de la ruta, comprobar el mapa del tráfico y conocer la ubicación de las áreas de servicio donde poder hacer una parada en el camino. En el caso de viajar en coche con niños tendrás que prever paradas más frecuentes y no apurar hasta las dos horas mínimas recomendadas en un viaje normal. En esta app encontrarás también el juego Autopistas Car Trip Adventure con el que se pretende enseñar a los pequeños todo lo que hay que tener en cuenta cuando se hace un viaje. Verán las carreteras por las que van a ir, las diferentes señales y pautas y consejos para evitar problemas durante el viaje. Una forma entretenida de pasar el viaje.

Ropa cómoda

Pasaremos varias horas en el coche por lo que la vestimenta de los niños es importante. Lo mejor es optar por ropa de algodón, transpirable, que no se ajuste y les permita libertad de movimientos. Es recomendable llevar una chaqueta o toalla a mano para poder tapar a los niños en caso de que el ambiente sea excesivamente frío.

Beber agua

Come alimentos ligeros y en pequeñas cantidades antes de iniciar el viaje, ya que con el estómago vacío es más fácil marearse. Lleva algo de comer por si surge algún imprevisto y el viaje se prolonga, y también varias botellas de agua para hidratar a los niños, tanto durante el viaje como en las paradas que realicéis.

El copiloto, tu aliado

Los niños pequeños son los acompañantes que más distracciones provocan al conductor según un estudio del RACE. La función del copiloto, o de cualquier otro adulto que viaje en el coche, es fundamental para ayudar a que el conductor se concentre en la carretera. Si eres el único adulto, ten todo a mano y haz paradas siempre que te sea posible para atender a los pequeños.

Viajar de noche te evitará atascos y el aburrimiento y cansancio de los más pequeños, aunque conducir de noche tiene muchas ventajas, no debemos olvidar que también conlleva sus riesgos, por lo que es importante tomar todas las precauciones. Pero si prefieres conducir de día, sigue estos consejos y ten paciencia, pronto llegarás a tu destino.